Con esta frase tan bíblica nos referimos a los tiempos de escasez, crisis, poca plata. Equivale, yo creo, a sacar la papa pelada de abajo de la cama en la noche de San Juan, con la salvedad de que con lo caras que están las papas, poca gente va a poder hacerlo este año.
Lo más raro es que justamente este año encontré trabajo, después de un bienio de actividades ultra independientes y cortas. Pero no por eso dejo de saber qué se siente andar con poca plata. Por lo general mi presupuesto es similar al de un estudiante universitario de clase media: locomoción, una ropita loca (o un librito) de vez en cuando, una cuota de universidad y algún cariñito (generalmente comida) para compartir con la familia. No le achunté a los números del Loto, así que mis acreedores deberán esperar. Los asientos son gratis.
3 comentarios:
Sentaditos nomás, jajaja
Así está escrito...
Maktub!!
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