Me encantaba esta lonchera. Llevaba leche al Jardín en el termo |
¿Cómo fue que esa mini cajonera con mimbre se transformó en un objeto importante?... lo de los libros y el reloj de la abuela (que fue del bisabuelo) se entiende, pero el mueblecito de mimbre sólo se justifica por todas las horas de juego que me dio cuando niña. Fue casa de conejos de plástico, teatro de Playmobil, joyero de chucherías, asiento de muñecas.
Pienso qué cosas son así, tan preciadas y en realidad no me duele guardarlas un tiempo y no me van a hacer falta en el día a día... pero pucha que me voy a alegrar al verlas de nuevo al regreso.
La lista:
- El peluche de orangután que me regaló Estudioso cuando empezamos a pololear
- Juguetes de guagua de Estudiosín
- Varios libros
- Fotos
Seguro se me quedan cosas en el tintero.
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