Parece contradicción, pero es así, cuando tiene que ver conmigo me es difícil eso de la pregunta incisiva, del atreverse patudamente a ir a alguna parte. Cuando me pongo mi disfraz de periodista (que no es el gorrito que dice "Prensa", sino que es como encarnar un personaje) sí puedo. Me imaginé dando vueltas como la Mujer Maravilla y apareciendo con la grabadora en la mano, jaja.
En nuestra tranquila pero breve estadía en el litoral central varias veces pasamos por fuera de la casa de Nicanor Parra. Pasamos en auto, pasamos a pie, despacito mirando si el antipoeta andaba por ahí. Pero nada, ni un pelo le vimos. No me atreví a golpear la puerta. Nada que hacer, cuando no estoy con el switch periodístico encendido no soy curiosa ni preguntona, ni asertiva ni contrapreguntona. Cuando no soy Memoriona puedo ser fome también. Es raro esto del multirol.
7 comentarios:
Hubiera sido genial encontrarse con él. Yo me hubiera atrevido
Yo le hubiera hablado si me lo encuentro en la calle, en algún negocio o en un restaurante. Pero no ir a huevearlo a la casa. A mí no me gustaría que me fueran a joder.
buena po wonder woman, jajaja
Te entiendo, nica a la casa. ¡Nicanor!
Y ahora tan famosa que está Las Cruces, que sale en la propaganda del Pato- Américo de Banco Estado
No era el momento nomás. De repente te lo vas a topar
Absolutamente de acuerdo. Uno disfrazado de periodista hace muchas cosas. pregunta, se mete, es inquisidor. Pero cuando uno anda de uno, pucha que cuesta la cosa. Es raro, muy raro, pero así no más es la cosa. Qué bueno que escribiste al respecto. Muchas veces he intentado explicárselo a otras personas, pero como que no lo creen. Es que nunca se han disfrazado de peridistas, creo yo, jeje
Cuídate mucho. regresé para quedarme ;)
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