Cantar, bailar, comer cosas ricas, conversación entretenida y risas por montones.
¿Qué importa si subimos un par de kilos?
Siguiendo con el recuento: no sé la fecha exacta en que escuché o leí por primera vez sus versos, pero siempre me parecieron conocidos. En la Antología de Don Neruda que tenía mi papá había unos versos tristes, con una fuerte tristeza.